Se trata de un documental que narra tres situaciones distintas en la vida de los habitantes comunes de un país ocupado y con la resistencia en acción.
El filme "Iraq in Fragments" (Iraq en fragmentos), del cineasta James Longley, se alzó con los premios al mejor director, a la mejor fotografía y a la mejor edición en el Festival de Sundance, a principios del año 2006.
Lo que distingue a "Iraq in Fragments" de todas las coberturas periodísticas acerca de ese país es que no trata directamente el asunto de la guerra. Los soldados estadounidenses permanecen al margen, al igual que los políticos iraquíes, los insurgentes del partido Ba'ath, de Saddam Hussein, y los terroristas de Al Qaeda.
En cambio, se puede apreciar la cultura iraquí y la vida cotidiana en un país ocupado por las fuerzas lideradas por Estados Unidos.
La fotografía es bella y se pueden ver escenas en locaciones tan diversas como escuelas, peluquerías, comercios varios, mezquitas, mercados y estaciones de tren.
"Las milicias existen en Iraq debido al vacío de poder provocado por un inefectivo gobierno central que obedece a la presencia estadounidense, que está dividiendo al país políticamente y no hay forma de crear un gobierno nacional mientras ellos sigan allí"